Familia perfecta, familia perdida

Todo comienza con Paula y Andrés, dos adultos muy exitosos que deciden ser padres por primera vez. John nació en el año de 1995, en un día de otoño soleado, fresco, ventoso, en un buen hospital, donde le dieron a la señora Paula el mejor servicio para que él naciera bien.

Desde pequeño ha sido un niño muy inteligente, cumplido, responsable y bien portado. Lo han educado de la mejor manera en un ambiente familiar muy sano, le han dado todo, pero sus padres no eran los típicos padres que tenían mucho trabajo y no le ponían atención, si no que, además de ser unas personas llenas de trabajo, le daban cariño y atención, pero sobre todo amor.

Siempre fue el más listo de la clase, cumplía con sus tareas, era el favorito de la mayoría de los profesores y compañeros de clase, su historial académico era impecable, siempre tuvo becas de excelencia académica, ha cumplido todas las metas que se ha propuesto, sus padres siempre han estado orgullosos de él, fue el más popular de la preparatoria, en fin muchísimas cosas más.

Ahora es un hombre a punto de terminar su carrera de diseñador industrial, está dispuesto a viajar por todo el mundo para conseguir sus sueños, lo que más desea es servirle a una compañía, diseñando un producto con el cual dicha compañía gane millones de dólares diarios.

Sus padres son, al igual que él, muy productivos y exitosos, su madre es  abogada y lleva 36 años de experiencia, su padre es ingeniero industrial y lleva sirviéndole a más de 10 empresas a lo largo de 37 años.

Falta un mes para que concluya dicha carrera y está ansioso por terminar su carrera, pero sobre todo por comenzar a trabajar.

Tiempo después empieza a buscar trabajo en diferentes empresas, comenzó en empresas pequeñas, ya que era su primer trabajo. Pasaron 2 meses para que le dieran una respuesta, sólo una empresa le dio empleo.

Trabajó en dicha compañía por 1 año y a lo largo de ese año pasaron cosas muy positivas para él, otra empresa con un estatus comercial más alto, le dio la oportunidad de trabajar como director general en diseño industrial gracias a su gran desempeño como empresario, y así fue como conoció a una chica hermosa de nombre Marimar, que muy pronto se convirtió en la novia perfecta para él.

Con mucho esfuerzo, dedicación y empeño, logro juntar lo suficiente para comprar una casa, muebles y lo esencial para sobrevivir.

3 años después, John y Marimar se fueron de vacaciones por 2 semanas para celebrar los logros de cada uno. De la forma más inesperada le propuso matrimonio a Marimar en una cena junto al mar, fue lo más romántico e inolvidable para los dos.

Regresando a casa, Marimar, Susana (la madre de Marimar), Paula y sus amigas, muy emocionadas comenzaron los preparativos de la boda. El vestido, la comida, el salón, los invitados, el pastel, etc.

Después de tanto preparativo, el día de la boda llegó, la novia emocionada y nerviosa, mientras que el novio contento y ansioso. Todos disfrutaron de una boda muy hermosa, donde los novios eran las personas más felices del mundo. Y al término de la fiesta, regresaron por sus maletas para irse de luna de miel.

Llegando de la luna de miel, John llevo a su esposa Marimar a su nueva casa, para vivir juntos. Al poco tiempo de casados, decidieron ser padres, tenían el nacimiento de sus hijas programado, en un buen hospital.

Han pasado 5 meses del embarazo de Marimar y todo va muy bien, se ha atendido de la mejor manera, ha ido con el ginecólogo, come saludablemente, son una familia muy feliz y ansiosa por el nacimiento de las pequeñas. Ya tenían sus nombres pensados, se llamarían Alejandra y Berenice.

Llego el momento del nacimiento, John y Marimar estaban dormidos cuando a ella se le rompió la fuente. Él, muy preocupado, la llevó al hospital donde junto con doctores, ayudantes, y demás, el quirófano estaba listo para el nacimiento. Su vida era perfecta, hasta ahora.

Nacieron dos hermosas niñas, Alejandra y Berenice, Alejandra nació con el peso adecuado, de buen tamaño y muy sana, mientras que Berenice nació baja de peso, muy chiquita que hasta cabía en la palma de la mano de su padre y no muy sana, así que la llevaron a urgencias para salvarla. Duró toda la noche en observación y bajo la preocupación de sus padres.

Según las observaciones del pediatra todo estaba en orden, por lo que les entregaron a la pequeña y a los pocos minutos, mientras estaban en la sala de espera pagando el servicio, la pequeña dejó de respirar y su corazón se detuvo, murió en los brazos de Marimar y ella estaba tan impactada y triste que ni siquiera se podía mover, lo único que pudo hacer fue verla y derramar una lágrima sobre ella.

Los padres estaban tan devastados que no le ponían atención a Alejandra, perdieron su trabajo, la empresa en la que trabajaba John tenía un producto terminado y sólo faltaba que el contrato fuera firmado, pero gracias a su ausencia no se firmó y la empresa quedó en quiebra. Obviamente fue despedido , se hizo alcohólico a causa de la depresión que tenía. En cuanto a Marimar estaba todo el día en cama.

Tan fuerte fue ésta situación que Alejandra no creció en un ambiente familiar igual al de su padre, si no que todo lo contrario, no le ponían atención, consiguieron otro trabajo, donde era de tiempo completo y tal vez, sí le daban todo lo que ella necesitaba para sobrevivir, pero nunca le dieron lo que ella más deseaba: amor, cariño, comprensión, una familia unida y feliz.

Pero Alejandra no se dio por vencida y aunque sus padres no le hicieran caso por su buen promedio, ella consiguió una de las metas que más quería, y asimismo logró trabajar y vivir en otro país, para olvidar el pasado. A pesar de todo lo que hicieron sus padres, ella los amaba muchísimo.

Ahora es una mujer profesional, que terminó su carrera como veterinaria, viajó a muchas partes del mundo y encontró al amor de su vida en otro continente, por lo que se quedó a vivir ahí.

Tal vez no tuvo una infancia ni una educación muy sana, ya que por el vicio de John ella creció en un ambiente familiar muy descuidado, pero eso sí, no terminó como sus padres, si no, terminó de la mejor manera que pudo debido a sus circunstancias.

-Fernanda Martínez